miércoles, 23 de diciembre de 2015

De mí no has querido ni matar la ausencia. Pensé que vendrías a llorar la noche. Han aparecido las bestias, y poseen la forma del miedo.

lunes, 14 de diciembre de 2015

te detesto por haber encendido la noche.
tengo la fortaleza de la roca. masacro hasta el último ápice de interés que provocas en mi carne. Aniquilo mi deseo de ti repitiéndome una y otra vez que poseo la fortaleza de la roca. ni la pena ni el deseo consiguen aminorar la distancia que te sostengo. si la soledad es un estado permanente con licencia de elegir a quién acompañar, he debido alzarme con la grandeza del electo. no importa cuánto de mí coloque en el fuego, las cenizas que portan mi amor regresan siempre a casa.

viernes, 11 de diciembre de 2015

he invertido tanto tiempo en aprender a mostrarme impávida ante tus acercamientos que me estoy encontrando con el miedo.
me pregunto si hay crueldad en ti.
ultimamente no consigo verte si no como un ser pequeño, enano, diminuto, incapaz de romperme el corazón.
he incluido las cosas que no me gustan de ti en este enamoramiento pasivo que me ocupa desde la primera vez que nos encontramos y con todo, no consigo desligarme de la idea de acercarme más y más a ti.
trato de desaparecer el tiempo que no estás presente, gasto mi energía en una bicicleta que soporta la soledad que carga en mi la noche, pero tornas al cuerpo como si algo de mí te fuera necesario, como si la honestidad de tu piel estuviera por encima de tu miedo.
y entonces pienso que un terror tan puro no puede provocarme daño.
seguiremos solos
porque tú te acercarás a mí cuando me invada el hastío
y yo no tendré fuerzas ni para mirarte.
y tú tomarás mi mano como ayer antes de la despedida,
la diferencia es que se habrá ido de mi todo el miedo, todo el amor.
cuando te acerques estaré tan lejos de ti, tan tan lejos de ti, que será imposible recordar la proximidad que ahora te mantengo.

y tú correrás a mí
y yo no podré ni tan siquiera mirarte.

domingo, 6 de diciembre de 2015

no han llegado los cuervos.
debían haber venido esta mañana.
mi cuerpo es el reposo de tu huída.
tu cadáver permanece en mí como si el hogar de tu muerte fuera mi carne.
y no se apiada de mí.
y los cuervos no llegan.
y debían haber venido esta mañana.

viernes, 4 de diciembre de 2015

tu muerte ha pasado a través de mí.
y no me he dado cuenta hasta que mis manos han comenzado a sangrar.